Punto de encuentro para el que busca la Luz, su esencia, su sexto sentido. Es para quien siente la inquietud de crecer y despertar su consciencia. Inquietud por encontrar la espiritualidad intrínseca que tiene por naturaleza y su expresión en la vida y más allá de lo que ven nuestros sentidos físicos y nuestras estructuras adquiridas y aprendidas.

lunes, 2 de noviembre de 2009

EL KARMA DE LA INACCIÓN

AMADO KUTHUMI.

YO SOY Kuthumi y me presento una vez más.

Dedicaremos nuestra charla del día de hoy al karma de la inacción (NdT. Pasividad, falta de acción, inercia).

¿Habían oído hablar antes sobre el karma de la inacción? Ustedes piensan que el karma solo puede generarse como consecuencia de vuestras acciones. En el curso de nuestras charlas anteriores, se les ha hablado sobre lo qué es el karma y cómo se crea. También tuvieron la oportunidad de hacerse una idea sobre el karma de naturaleza positiva. Y, aquí, una vez más, volviendo al tema del karma, me gustaría ofrecerles una Enseñanza sobre el karma de la inactividad.

Imaginen que alguien se dirige a ustedes en busca de ayuda y ustedes no desean hacerlo. ¿Crearían karma en ese caso, teniendo en cuenta que ustedes no habrían hecho nada? ¿No harían algún esfuerzo para ayudar a la persona que acude a ustedes?

Mucha gente en la Tierra crea karma justamente por no realizar ninguna acción en el momento en que hay que actuar.

La Ley Divina estipula que ustedes crean karma incluso en aquellos casos en que no realizan acción alguna.

Ustedes llegan al mundo con el fin de acumular experiencias y actuar. Por lo tanto, al desviarse de una acción, generan karma.

Permítanme ofrecerles algunas explicaciones sobre este asunto. Recuerden que el karma es la energía erróneamente dirigida cuando realizan actividades incorrectas. Si ustedes usan la Energía Divina que fluye dentro suyo desde el mundo Divino y en conformidad con la Ley Divina, entonces generan buen karma – atesoran en los Cielos. Si usan incorrectamente la Energía Divina, ésta se acumula en sus cuerpos inferiores en forma de energía negativa. Esta energía, en conformidad con la Ley Divina, les atrae esas situaciones con las que necesitan lidiar una y otra vez con el fin de aprender una lección, tomar las decisiones correctas y, en esta forma, sanar vuestro karma. Por ejemplo, en el caso de albergar algún tipo de envidia y difaman o calumnian, crean karma. Y ese karma regresará a ustedes a través de situaciones en las que se verán expuestos exactamente a las mismas acciones expuestas. Entonces, podrán ser objeto de envidias, insultos o lenguas venenosas. A fin de saldar vuestro karma, conviene enfrentar dichas situaciones con humildad y acatamiento a la Voluntad de Dios, sin juzgar a sus agresores, y perdonando cuantas veces sea necesario a quienes les ocasionen daño.

Esa es la razón por la cual decía Jesús que se debe perdonar “hasta siete veces setenta”. Ustedes nunca saben cuántas veces, en vidas anteriores, han insultado a la gente y se han visto comprometidos en acciones indecorosas.

Pero volvamos a nuestro punto sobre el karma de la inactividad.

Por ejemplo, una persona se dirige a ustedes en busca de ayuda y ustedes se niegan a ofrecérsela. ¿Estarían creando karma por ello teniendo en cuenta que ustedes no estarían haciendo uso de la energía divina? ¿ó sí? Simplemente no hacen nada. Esta situación no es tan simple como parece. Que ustedes creen karma o no, eso depende de muchas circunstancias.

Para empezar, ustedes tienen que estar convencidos que esa persona, que se dirige a ustedes en busca de ayuda, la necesite en realidad. Si ella se dirige a ustedes en busca de ayuda y no la necesita, y si ustedes le ayudan, esa persona crea karma. En este caso, ustedes no crean karma pero indirectamente contribuyen a crearlo al ofrecerle ayuda a dicha persona. Cuando ustedes logran un cierto nivel espiritual, están obligados no solo a su propia auto-observació n sino también a ayudar a otros a escapar de situaciones en las cuales puedan crear karma..

Otro caso. Si la persona, quien se dirige a ustedes en busca de ayuda, realmente la necesita, ustedes no crearán karma si rechazan ayudarle en caso que no pudiesen proporcionarla.

Pudiera suceder que la persona estuviese atravesando por una difícil situación y necesitase ayuda en realidad, por ejemplo, si necesita dinero. Y ella se dirige a ustedes en busca de ayuda. Si ustedes no pueden ayudar a esa persona o si piensan que el dinero que tienen es, en primer lugar, para alimentar a su familia, no crean karma en este caso. Es muy posible que la persona que les haya pedido ayuda, se haya negado a suministrarles esa misma ayuda en vidas anteriores cuando ustedes se dirigieron a ella y ahora deben retornarle su deuda karmática.

Y, finalmente, si una persona se dirige a ustedes en busca de ayuda y ustedes pueden proporcionársela pero se niegan, entonces crean karma.

Ustedes deberán ayudar siempre a la gente que acuda a ustedes en busca de ayuda. Quizás pueda parecerles que pudiendo ayudar y negarse a hacerlo, no estén haciendo uso alguno de la Energía Divina y, por lo tanto, no están creando karma. Sin embargo, los sentimientos y motivos que les conducen a tomar una decisión hacen que ustedes creen karma. Por ejemplo, si vuestras intenciones son las de darle una lección a esa persona que viene en busca de vuestra ayuda, o se complacen por el hecho que alguien venga a humillarse ante ustedes, o simplemente, son demasiado perezosos para ofrecer esta ayuda o la avaricia los domina. Cada uno de estos motivos y otros tantos son la verdadera razón de vuestra negación a ayudar. Son cualidades no-divinas y ustedes crean karma al fomentarlas.

Por lo tanto, antes de rechazar a una persona que les haya solicitado ayuda, consideren siempre y cuidadosamente todos los “pros” y todos los “contras”.

Vuestro mejor consejero en una situación difícil será indudablemente vuestro Ser Superior. Porque vuestro Ser Superior siempre sabe si deben ayudar o no. Sin embargo, si se dificulta la conexión con vuestro Ser Superior o se sienten inseguros de las respuestas recibidas, entonces, sopesen atentamente vuestras motivaciones y sentimientos internos. Piensen.. Ustedes no necesitan ayudar a la persona porque tienen pereza de hacerlo o porque sienten una redecilla con lo que les implique tiempo o dinero. O empiezan a juzgar a esta persona por haber caído en dicha situación, en la cual él o ella son incapaces de resolver a su modo. Si pensamientos similares se cruzan por vuestra mente, superénlos, dominénlos y suministren la ayuda que les sea solicitada. Después de dispensar esa ayuda, ustedes sentirán un alivio y ésta es una señal de que han actuado correctamente y han liberado algo del karma que han estado trayendo consigo desde el pasado.

Si ustedes no albergasen sentimientos negativos hacia esa persona que necesita de vuestra ayuda pero vuestra intuición les dice que no deben ayudarla, pudiendo hacerlo, entonces, con una probabilidad de uno sobre cien, podría representar una prueba que ustedes están imponiendo sobre dicha persona. Sin embargo, éste sería un caso extremadamente raro y tendrían que tener un alto nivel espiritual y pasar por las iniciaciones requeridas para recibir el manto de Gurú con el fin de hacerse acreedor al derecho de imponer dicha prueba a otros. Por lo tanto, les recomendaría ofrecer siempre la ayuda, cada que puedan hacerlo, a cualquier persona que acuda a solicitarles ayuda porque en realidad lo necesita.

En realidad, muchos de los problemas en vuestro mundo están exactamente relacionados con este tipo de situaciones - la gente busca ayuda y no la encuentra -. Por ejemplo, cuando se acude a algunos funcionarios públicos, cuya posición los obliga a proveer la ayuda e incluso reciben un salario a cambio y, sin embargo, se niegan a ofrecerla en muchas ocasiones.

Ustedes deben recordar siempre que en su siguiente vida, se cambiarán los roles y el empleado, quien por inadvertencia, no cumpliera con su deber cómo debiera haberlo hecho, estaría en la posición de la persona suplicante y obligado a pedir ayuda exactamente a esas personas a quién él se negara a ayudar.

Dicho problema se presenta exactamente con aquellos que ostentan el poder de este mundo, con los que tienen dinero en sus manos. La enorme riqueza es siempre una evidencia del karma que la persona posee y esto se relaciona con una incorrecta actitud hacia el dinero.

La riqueza es dada a la gente como una oportunidad de liberar karma. Por lo tanto, una persona a quien se le haya otorgado una enorme riqueza para que pueda liberarse de su karma, tendrá que analizar muy concienzudamente lo que puede hacer con dicha riqueza con el fin de ayudar a tantos indigentes como sea posible. Por otra parte, ofrecer una ayuda puntual y no invertir el dinero es una ostentosa caridad. Porque si un ser humano gasta incorrectamente la riqueza que ha recibido en esta vida – en busca de objetos, placeres, lujuria y prestigio - entonces, podrá decirse con un 99% de certeza que en la siguiente vida tendrá un karma en el que pueda nacer quizás dentro de una familia muy humilde y se vea forzado a mendigar a lo largo de toda su vida, pudiendo difícilmente equilibrar los dos extremos de la balanza.

En consecuencia. Nunca sientan envidia por aquellos poseedores de enormes riquezas. Una enorme riqueza es evidencia de un karma muy grande en el presente y si ellos lo controlan o usan incorrectamente, entonces, serán objeto de un karma aún mayor en el futuro.

Pienso que la charla de hoy ha sido util. Al menos, este conocimiento podrá ayudarles a evitar crear karma por no actuar en sus vidas.

Gracias Dios, tus años son un solo día y tú día no es cada día, sino el ‘hoy’, porque tu ‘hoy’ no desaparece ante el mañana y no sigue el ayer.Tu ‘hoy’ es la eternidad”. San Agustín.