La noche oscura del alma, es el momento en que nuestra vida se paraliza y la crisis del vacío existencial se adueña de nosotros.
Ese, sin embargo, parece ser el momento perfecto para la decisión de despertar para que la conciencia se exprese reconociendo lo que ya no desea y buscando el contraste con lo que ha vivido hasta ahora en este plano.
El primer síntoma de claridad en el alma es ver la UNIDAD con aquellos que aparecen en nuestras vidas.
La frase 'ama a tu prójimo como a ti mismo' es la base de la práctica del amor y sobre ese pilar esencial se avanza al no hacer nunca más al otro lo que no queremos recibir nosotros mismos.
Y un siguiente paso trascendente brindado por Jesús al mundo es el de 'ama a tu enemigo como a ti mismo'.
Si entendiéramos esto en su grandeza, no tendríamos más enemigos o adversarios, ya que los trataríamos como a otra parte nuestra y en el acto desaparecería toda división, toda dualidad, todo antagonismo.
'Nuestro enemigo es nuestro mejor maestro.
Al estar con un maestro podemos aprender la importancia de la paciencia, el control y la tolerancia, pero no tenemos oportunidad real de practicarla.
La verdadera práctica aparece al encontrarnos con un enemigo'
domingo, 29 de junio de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario